Un flujo de vehícu­los disminuido se registró en las ca­lles de la capital desde las seis de la mañana de ayer, en el primer día de aplicación de las medidas dis­puestas por el presidente Danilo Medina.

Un recurrente silencio invadió tramos de avenidas principales, que un día normal tienden a im­pregnarse de los sonidos genera­dos por los vehículos y peatones circulando por la ciudad.

El panorama de la ciudad capi­tal carente del habitual flujo de personas, situación provocada por el cierre temporal de comer­cios, la suspensión de la docen­cia y la modificación de horarios, se constató tras un recorrido rea­lizado  por periodistas de Listín Diario.

“Da gusto manejar hoy”, se escu­chó decir a un chofer de camión, mientras periodistas de este me­dio realizaban un video de la vis­ta panorámica en la intersección de las avenidas 27 de Febrero y Máximo Gómez.

Las palabras de este conductor se justificaron al observar cómo dos de las avenidas principales de la ciudad capital permitían una circulación fluida ante la po­ca cantidad personas que la tran­sitaban,  situación que un día de semana convencional es muy di­ferente.

Escaso transporte público

“La cosa está lentísima; yo solo he dado una vuelta hoy. De che­pa tengo para pagar la ruta hoy”, manifestó un chofer de carro pú­blico, quien prefirió el anonima­to, que circula por la avenida 27 de Febrero.

Así como este conductor de ca­rro público, otros choferes de este tipo de transporte y de las   “guaguas”, comentaron que es­casas personas han utilizado sus servicios.

Transporte interurbano

Las paradas de autobuses inter­urbanas mostraron menos flujo de pasajeros ayer, los transpor­tistas se mostraron preocupa­dos porque no tienen un plan de emergencia para estos casos.

“Estamos aquí solo por dar el servicio” comentó un chofer de la parada de autobuses Vicente Noble-Tamayo, debido a que es­tán tardando hasta una hora y treinta minutos para salir a sus destinos por la poca afluencia de personas que están viajando al interior.

Un chofer de taxi, en la misma parada comentó que se verá obli­gado a irse para su pueblo “allá uno encuentra aunque sea pláta­no y comida, porque aquí me voy a morir de hambre”.

Algunos autobuses de la parada del 9 de la Duarte han salido has­ta con dos pasajeros aseguró Jo­sé Manuel Almánzar, chofer de la ruta, quien pidió al gobierno una ayuda a ese sector para cubrir las pérdidas que les está causando la situación actual.

Los autobuses, que regular­mente salen a su destino cada 30 minutos, están tardando una hora y treinta minutos para salir con apenas dos pasajeros.

“En una hora más, va cayendo el transporte, porque si la gente no sale, las guaguas tampoco, yo tengo muchos amigos que no sa­lieron, muchas guaguas están sa­liendo porque amanecieron aquí en la capital, pero de los pueblos casi no están viniendo”, dijo un chofer de la parada desde donde salen los autobuses de San Juan de la Maguana, Elías Piña, Hon­do Valle, Vallejuelo, El Cercado, Bohechío, Fantino, Pedro Santa­na, Bánica, El Llano y Sabaneta.

Límite de pasajeros

Sobre las medidas a implemen­tar en el transporte público, la directora del Instituto Nacional de Tránsito y Transporte Terres­tre (Intrant), Claudia Franches­ca de los Santos, dijo que se limi­tará la cantidad de pasajeros en los carros públicos a cuatro per­sonas y en autobuses al número de asientos del vehículo.

Además, se deberá de mantener la higiene de las instalaciones, superficies y vehículos, limpián­dolos con frecuencia.