En horas de la mañana, el caos impera en muchos ne­gocios, principalmente en las instituciones bancarias, donde muchas personas hacían largas filas para rea­lizar diversas transacciones financieras.

La situación se ha agra­vado en esta Semana Santa y la queja de la gente cre­ce, porque no pueden rea­lizar las diligencias nece­sarias, principalmente en los bancos. Mientras en los supermercados, colmados, farmacias y otros estableci­mientos autorizados para operar la aglomeración es más manejable.

En la mayoría de esos ne­gocios, se permite la entrada de clientes correspondiendo a un protocolo de grupos de tres, ocho y 15, y luego que otros salen de los mismos.

“Es molestoso para nuestros clientes, pero te­nemos que cumplir con lo establecido, detener el co­ronavirus es un asunto de todos”, dijo Miguel Rosa­rio, propietario de un pe­queño supermercado ubi­cado en la avenida Juan Pablo Duarte.

También choferes del transporte público operan en algunas rutas, la mayo­ría cubiertos de mascarillas y guantes. Además exigen a los pasajeros que al me­nos lleven cubierta la boca, o no los abordan.

Toque de queda

Desde las 4.00 de la tar­de, las calles de Santiago comienzan a quedar deso­ladas, La Dirección Cibao Central de la Policía aduce que los habitantes de San­tiago, Espaillat y La Vega, han acatado con disciplina y orden el período de cua­rentena y el toque de que­da, desde la 5:00 de la tar­de a la 6:00 de la mañana.

Expresó que en Santia­go y el Cibao Central, en los tres primeros días de la ampliación del toque de queda eran detenidas entre 100 y 150 personas, pero que ahora se ha reducido a 15 y 20, lo que indica que están cumpliendo con lo dispuesto por el presidente Danilo Medina.