Ante el agotamiento de la capacidad de las unida­des de cuidados intensivos (UCI) por la alta demanda de ingresos de pacientes con Covid-19, se hace ur­gente que el país ponga en marcha la instalación de una red de cuidados inter­medios en los principales hospitales a nivel nacio­nal, donde los pacientes reciban una temprana atención especializada.

Así lo propone el exper­to en gestión de proyec­tos hospitalarios, el anes­tesiólogo Rafael Pérez, quien explica que con una red establecida de cuida­dos intermedios se evitará que muchos pacientes con Covid lleguen a condicio­nes críticas y así se frena la presión sobre las UCI y los equipos ventilación.

Además, dijo que tam­bién reduce la mortalidad que se registra en el país a causa de la enfermedad respiratoria que hasta ayer había provocado 929 de­funciones.

Cada hospital provincial

Las unidades de cuida­dos intermedios se debe­rían instalar, señala el doc­tor Pérez, en cada hospital provincial para así evitar que pacientes tengan que ser trasladados de una ciu­dad a otra, lo que pone en riesgo su vida.

“Existen en el país sufi­cientes especialistas de di­ferentes áreas capaces de manejar esos servicios me­diante un protocolo esta­blecido”, añadió.

Datos oficiales indican que el país cuenta con 438 camas UCI y 346 ventila­dores a nivel público y pri­vado para la atención de pacientes con Covid, cuya alta ocupación en ciuda­des como Santiago y Santo Domingo preocupa a médicos.

Para la instalación de esos servicios, Pérez plan­tea una inversión del Esta­do de alrededor de 1,300 millones de pesos, que una vez superada la crisis que­dará como fortaleza del sis­tema de salud.

“Es una necesidad apre­miante en estos momentos dotar a los principales hos­pitales del país de unidades de atención de cuidados in­tensivos o intermedios que permitan enfrentar la si­tuación”, dijo Pérez.

Indicó que una vez pa­sada la pandemia, “queda resuelto el problema de te­ner que estar abarrotando las UCIS de las grandes ciu­dades”.