El Tribunal Superior Elec­toral (TSE) ha fallado 55 de las 108 demandas que ha recibido contra los re­sultados de las elecciones del pasado 5 de julio, equi­valente al 59%.

La mayoría de los recla­mos son del nivel de dipu­taciones, principalmente por inconformidad con los votos preferenciales.

Ya el TSE ha ordenado a varias juntas electorales el examen de votos nulos y la revisión de actas de escru­tinios al acoger recursos de apelación, pero algunos re­clamos no han prosperado, porque se usa la vía inco­rrecta de la acción de am­paro y otras veces porque el TSE no constata la vul­neración de los derechos fundamentales. Los recur­sos de apelación y deman­das de nulidad son conoci­das en cámara de consejo, de forma administrativa, mientras que las acciones de amparo en audiencia pública virtual.

Las últimas tres accio­nes de amparo decididas fueron declaradas inadmi­sibles, las cuales fueron interpuestas por Johnson Encarnación, aspirante a senador del Partido Revo­lucionario Moderno (PRM) por Elías Piña; Ceila Lice­lot Encarnación Minyety, a diputada nacional por ese mismo partido, y Andrés Reyes Fortunato, a dipu­tado en la provincia Santo Domingo por la Fuerza del Pueblo.

El TSE no admitió las acciones por ser notoria­mente improcedentes, en virtud del artículo 70, nu­meral 3, de la ley 137-11, orgánica del Tribunal Constitucional y de los pro­cedimientos constituciona­les, así como precedentes del TC y del TSE.

Las acciones de ampa­ro fueron conocidas en audiencia pública virtual por los jueces del TSE, Ro­mán Jáquez Liranzo, pre­sidente; Rafaelina Peralta, Cristian Perdomo, Ramón Madera Arias y Santiago Sosa.

CLAVES
Elecciones.
El 5 de este mes se cele­braron en el país eleccio­nes presidenciales y le­gislativas.

Conflictos.
Los principales conflic­tos se orginaron en el ni­vel de diputados, por el descuadre de actas y el método D’ Hondt.