¿Qué es el bienestar? Es la primera pregunta pa­ra la entrenadora Melis­sa Peña, conocida en las redes sociales como @melicoach, luego de meses adap­tándonos a la nueva realidad que vive el mundo por el Covid-19.

Para la experta, el bienestar es el resultado de condiciones men­tales y físicas que proporcionan un sentimiento de satisfacción, principalmente, cuando nos en­frentamos a las adversidades, que es cuando más se necesitan.

La coach compartió en El To­que de las 9:00 de LISTIN DIA­RIO un análisis sobre las valiosas lecciones que nos ha regalado la pandemia, cómo superar las ad­versidades individuales y colecti­vas.

A través de las redes sociales de Instagram, Facebook y Youto­be, la coach dijo a las audiencias que se está experimentando una revolución de las relaciones cog­nitivas, y esto se debe a que por la llegada de la pandemia se es­tá haciendo el trabajos desde ca­sa, las clases son virtuales, falta de contacto físico, pero también están aquellas realidades menos evidentes, que son más difíciles de subsanar y enfrentar.

“Vivimos bajo la sombrilla del confort y llegó el Covid y no es­tábamos tan preparados para afrontarlo, ni tampoco somos tan como deberíamos “.

Para ella existe una verdad universal, la que todos debemos aceptar, y una de ella es estar vivo y esto implica estar en constante cambio, que pueden ser volunta­rios, involuntarios y abruptos, y debemos estar preparados, prin­cipalmente lo que atañe a la sa­lud física y mental.

Existe una conexión entre sa­lud física, mental y resiliencia porque si las personas tienen una salud física cuestionable, corre riesgo de desarrollar una salud mental por igual y su cuidado es que nos hace fuertes.

Como coach tiene su objetivo es lograr que las personas puedan incorporar el bienestar en este nuevo estilo de vida. Los cambios detonan mucho miedo preocu­pación, estrés, depresión y ansie­dad, lo que provocan, sedentaris­mo, mala alimentación, y si esto lo normalizamos, se presentan como secuelas enfermedades co­mo la diabetes, afecciones cardio­vasculares e inmunológica.

Por tal razón es de vital impor­tancia la actividad física porque reduce los riesgos de todos estos malestares y a largo plazo mejora la calidad de vida, y tambien un sentimiento de bienestar colec­tivo que ayudará a enfrentar los retos, y así superar las adversida­des que se nos presentan por los cambios, como en estos precisos momentos.

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 Un renacer con responsabilidad

 Según la organización mun­dial de la salud los adultos deben realizar una actividad física dos a tres días por se­manas.

Los adultos mayores sus ac­tividad física estará focaliza­da en fortalecer los músculos para mejor el equilibrio y el mínimo serán dos o tres ve­ces por semana.

La actividad física no debe verse como una opción si­no como una necesidad para promover hábitos saludables y ahora tenemos buen pun­to de partida con los entrena­mientos virtuales.